"Es evidente la cualidad evasiva con que responde el poder político a los informes basados en datos reunidos bajo rigor científico; pero también a los propios reclamos de la sociedad. Con esta actitud, el Gobierno crea una opinión falsa en sectores masivos y vulnerables de la comunidad. Por esta razón, luego consideran como verdadero lo que expresa el referente político.

Hoy no existen premios ni castigos. Todo da por igual. Lo vemos en la propia escuela. Todos llegan por igual al destino, un destino catastrófico. El discurso demagógico del Estado dice que hay que permitir a todos el ingreso a las escuelas, tanto de niños que tienen el acompañamiento de sus padres, como de aquellos con padres ausentes. De eso no hay dudas.

Sin embargo, es preocupante que los dirigentes políticos se apropien de la educación de los menores, cuyos padres son víctimas de este perverso sistema de esclavización laboral y abandono por parte del propio poder que los utiliza con fines electoralistas.

Por otro lado la realidad nos muestra que la violencia ya está instalada en las instituciones educativas, pero de eso no se habla. El presupuesto para educación tampoco permite la excelencia formativa en los cuadros docentes. Para colmo, el sistema funciona sin que los educadores puedan opinar para mejorarlo, al igual que los padres.

También existe la negación sistemática y absoluta que en distintas formas afecta todo principio de conducta, de organización, de autoridad, de orden moral y social. Este es el nudo de la destrucción de la República, es el quebranto de la voluntad del pueblo. Y en Tucumán, la escuela marcha por ese camino. No se dignifica al docente, ni se respetan los derechos de los niños.

Los padres solidarios observamos con mucha preocupación esta realidad, porque existen menores en manos de un Estado manipulador; menores cuyos hogares están a la deriva o abandonados. Duelo lo que sucede con esta nueva generación de argentinos. Quienes proponemos un enfoque distinto y superador, sostenemos que el sistema educativo debe ser -además de inclusivo- integrador, porque la persona debe ser elevada plenariamente como tal en su dignidad y libertad".

Lic.Marcelo Funes
patria_justa@yahoo.com.ar

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